En nota de InfoCatolica.com se han conocido las palabras pronunciadas por Donald Trump, el jueves recién pasado ante la Coalición de la Fe y la Libertad en la apertura de la Conferencia Conservadora “Road to Mayority”. Sus comentarios fueron calurosamente aplaudidos en la conferencia por sus continuas menciones a Dios y la fe, y también por centrarse en gran medida en la libertad religiosa que defiende el conservadurismo.
“Nuestros derechos vienen de Dios”, dijo el presidente Trump a una multitud mayoritariamente protestante conservadora esta semana, “y nadie en la Tierra puede quitárnoslos”. “La familia es la base de la vida americana”, recordó también, agregando que “las familias y las iglesias – no los funcionarios del gobierno – saben mejor cómo crear una comunidad fuerte y amorosa”.
“Sabemos que los padres, no los burócratas, saben mejor cómo criar a los niños y crear una sociedad próspera”, agregó Trump. “Y sobre todo, sabemos esto: En América, no adoramos al gobierno. Nosotros adoramos a Dios”. “La fe y la libertad están vinculadas porque la libertad proviene de nuestro Creador”, señaló: “Nuestros derechos nos son dados por una autoridad divina, y ninguna fuerza terrenal puede quitarnos esos derechos”.
“No retrocederemos de hacer lo que es correcto”, dijo para luego continuar diciendo que era debido a la Biblia que “sabemos que prevalecerá la verdad”. “Y como ustedes saben, estamos bajo asedio”, dijo Trump a la audiencia conservadora el jueves, pero siempre “defenderemos su derecho y el derecho de todos los estadounidenses a seguir y vivir según las enseñanzas de su fe”.
Trump citó su orden ejecutiva promoviendo el libertad de expresión y la libertad religiosa, firmada en mayo, enfatizando su apoyo a la libertad religiosa. La orden le dice a las agencias federales que aborden objeciones de conciencia a través de regulaciones enmendadas sobre el mandato de anticoncepción de Obamacare. También da a las iglesias más libertad para hablar de asuntos políticos en las elecciones, algo que Trump prometió en particular hacer rescindiendo la Enmienda Johnson para que los pastores puedan predicar libremente.
“Ningún trabajador federal debería censurar sermones a pastores”, advirtió. “Mientras yo sea Presidente, a nadie se le impedirá practicar su fe o predicar aquello que guarda en su corazón», continuó. «Es hora de poner fin a los ataques a la religión”. “Terminaremos la discriminación contra las personas creyentes”, dijo. “Nuestro gobierno celebrará una vez más y protegerá la libertad religiosa”. Continuó diciendo que América era la suma de sus ciudadanos. «Y todos somos hechos por el mismo Dios Todopoderoso”. “Mientras nos mantengamos orgullosos de nuestra fe, valoremos nuestras convicciones y mantengamos la fe en nuestro Dios, no fallaremos”.
Dijo también que mientras el país permanezca fiel a sus valores, leal a sus ciudadanos y consagrado a su Creador, sus mejores días aún están por llegar.
Trump también reiteró la promesa de retirarse del Acuerdo Climático de París para proteger los empleos, la soberanía y la libertad de Estados Unidos. El acuerdo global sobre el clima es polémico, no solo por su impacto negativo en los empleos estadounidenses y el llamado cambio climático, sino también por el fomento del aborto, la anticoncepción y la ideología de género.
No deja de ser relevante sus afirmaciones en esa asamblea, ya que, para los integristas religiosos, el cambio climático es un proceso del fin de los tiempos, por lo tanto, consideran iluso hacer esfuerzos para detenerlo.